EN QUÉ CONSISTE LA LIMPIEZA DENTAL POR ULTRASONIDO

La limpieza dental por ultrasonido consiste en hacer una profilaxis para eliminar el sarro o cálculo de los dientes, utilizando para ello unos instrumentos llamados aparatos de ultrasonido, diseñados especialmente con esa finalidad.

Esta útil herramienta dental va a generar ondas vibratorias con intensidad muy elevada, que van a tener la capacidad de eliminar todo el acúmulo de suciedad que se ha solidificado en diversas áreas de la superficie dental.

Para qué se usa la limpieza dental con ultrasonido

Una buena salud dental te brinda tranquilidad y una mejor calidad de vida, porque contar con todas las piezas de la dentadura favorece un mayor disfrute de los alimentos y también una mejor digestión porque permiten masticar correctamente.

Y una de las normas básicas para que la boca se mantenga en perfecto estado es tomarse el tiempo necesario para realizar un cepillado adecuado después de cada comida, acompañado por el uso del hilo dental y el enjuague bucal.

Esto se hace con la finalidad de eliminar los restos de comida que quedan en la boca, ya que estos van a formar una masa blanca denominada biofilm o placa dental, que además está llena de bacterias, y que se elimina con el cepillado.

Sin embargo, si esta placa no se quita, bien sea por no cepillarse o por hacerlo de forma incorrecta, al cabo de 24 horas esta masa comienza a endurecerse por la acción de la saliva, y se transforma en el temido sarro o cálculo dental.

El sarro no puede ser eliminado con el cepillado, ni con remedios caseros, el único modo de removerlo es mediante una limpieza bucal o profilaxis dental, hecha por  profesionales como el higienista dental o por el dentista.

El procedimiento puede efectuarse de la manera tradicional o manual, utilizando algunos instrumentos como la hoz, el cincel, las curetas y el espejo, que a muchas personas les resulta estresante.

En qué consiste la limpieza dental con ultrasonido

Esta clase de limpieza dental consiste en usar un instrumento de ultrasonido que tiene una punta que se adapta a la superficie del diente, para transmitir una vibración de alta frecuencia.

Estas ondas que envía el aparato van a romper el sarro acumulado en los dientes, llegando a lugares imposibles para el cepillo, especialmente en la zona de unión entre el diente y la encía.

Como estas ondas de ultrasonido generan mucho calor, que puede dañar la pulpa dental, este instrumento viene acompañado con un sistema de enfriamiento que produce chorros de agua, que ayuda a remover los restos de sarro eliminado.

Al finalizar este procedimiento el especialista procederá a hacer una revisión manual para ver que todo esté limpio, y si quedó algún resto de cálculo dental, lo eliminará con cualquiera de las herramientas de siempre.

Se hace de esa manera porque cuando hay poco sarro es más sencillo retirarlo de la manera tradicional, ya que el aparato de ultrasonido requiere ser configurado y esterilizado para poder utilizarlo.

Ventajas de realizar limpieza dental por ultrasonido

Una de las mayores ventajas para el paciente es que en casos normales se trata de un procedimiento indoloro, que puede ser realizado por el higienista dental.

Solo en algunos  casos de personas con inflamaciones en las encías o con mucha sensibilidad se puede necesitar anestesia, y los servicios de un dentista.

Es mucho más rápido y fácil eliminar la placa dental y el sarro con ultrasonido, el profesional no tiene que usar tanta fuerza como en la limpieza manual, y el paciente no tiene que estar tanto tiempo con la boca abierta.

Los aparatos de ultrasonido tienen una frecuencia regulada, por lo cual son más delicados con los dientes, y se pierden muchas menos partículas sanas que cuando se hace de la manera tradicional.

Diversos estudios han demostrado que la limpieza con ultrasonido es más eficaz para remover el sarro y la placa acumulados en el surco debajo de las encías.

Contraindicaciones de la limpieza dental por ultrasonido

La limpieza dental por ultrasonido no puede ser empleada con todos los pacientes, ya que para algunos de ellos puede ser muy incómodo.

No es  recomendable en los casos de personas que tengan dientes muy sensibles o desmineralizados, ni en quienes tengan fracturas dentales o restauraciones realizadas con porcelana.

Tampoco es un procedimiento recomendado para personas que padecen ciertas enfermedades como la diabetes que no esté controlada, que tengan su sistema inmunológico débil, o con tratamientos de corticoides o inmunosupresores. 

No se recomienda para los pacientes que están recibiendo radioterapias, que sufran de osteomielitis locales, que padezcan enfermedades cardiacas o a los que tengan marcapasos, excepto en los marcapasos de última generación que suelen ir con una cápsula de protección que no se altera con el movimiento del ultrasonido.

Escoger entre la limpieza dental por ultrasonido y la limpieza manual

La decisión acerca de cuál de las dos usar, va a depender tanto del paciente como del especialista que la va a efectuar.

Ya que, aunque a todos les gustaría quedarse con la menos dolorosa, hay casos como los vistos anteriormente en los que resulta imposible.

Cuando se presenta un paciente con grandes cantidades de sarro acumulado en los dientes, el profesional siempre va a preferir el ultrasonido, por su rapidez y porque se evita el agotamiento muscular que implica hacerlo de forma manual.

Sin embargo, si se encuentra con caso en el que hay poco cálculo dental, es preferible hacerlo de al estilo tradicional, ya que así será más práctico y rápido, porque el aparato de ultrasonido requiere de cierta preparación.

Aunque la limpieza dental por ultrasonido sigue ganando terreno y las preferencias de los pacientes, la forma manual va a continuar teniendo un lugar importante, como complemento para algunos pacientes, y como única alternativa en otros.

En todo caso, las recomendaciones siguen siendo las mismas: cepillarse bien después de cada comida, usar correctamente el hilo dental  y no olvidar el enjuague bucal.

Y por supuesto hay que ir a visitar el dentista al menos cada 6 meses, o con la frecuencia que te indique, para que tengas una buena salud bucal, y que puedas llegar a la vejez con todos tus dientes completos.

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