Los dientes son una parte muy importante de nuestro cuerpo, puesto que estéticamente hacen más agradable nuestro rostro, además de tener gran importancia funcional, por cuanto son el principio de nuestro aparato digestivo y elemento indispensable para el procesamiento de los alimentos, además de que modula el habla.
Sin embargo, muchas veces no les damos el debido cuidado, puesto que están expuestos a diferentes enfermedades y accidentes.
De acuerdo con lo anterior, aquí te presentamos de qué están hechos los dientes como un primer paso para la comprensión de la importancia de cuidarlos debidamente.
Qué son los dientes y otras curiosidades
Todos conocemos los dientes, pero, ¿realmente sabemos qué son?, los dientes son órganos mineralizados que los hace el elemento más duro del cuerpo humano y se caracterizan por su:
- Tamaño, puesto que se les llama macrodontos, mesodontos y microdontos, si son grandes, normales o pequeños, respectivamente
- Forma, la que depende de su ubicación en la boca y función
- Color, en este sentido los dientes temporales tienen un color azulado y los permanentes un blanco amarillento, siendo los caninos los dientes que tienen el mayor tono amarillento (por ser los más gruesos)
Como curiosidad se tiene que, contrariamente a lo que se cree respecto al aseo, el color amarillento se relaciona directamente con la cantidad de calcio que contiene la pieza.
Cómo aparecen los dientes en el cuerpo
Ellos comienzan a formarse en las mandíbulas durante la gestación y comienzan a emerger a partir de los 6 meses de edad en los bebés y siguen saliendo hasta un total de 20. Se les llama dientes temporales o “dientes de leche”.
Luego, a partir de los 5 o 6 años, comienzan a caerse estos dientes, comenzando por los incisivos, para dar paso a los dientes definitivos. Este proceso suele durar hasta alrededor de los 13 años, y es aquí cuando se pasa de 20 a 32 dientes.
Los tipos de dientes
Un adulto normal tiene un total de 32 dientes los cuales se dividen de la siguiente manera:
- 8 Incisivos, que son los que están en el centro de la boca, 4 en la mandíbula superior y 4 en la inferior. Tienen forma afilada
- Subdivididos en 4 incisivos centrales y otros 4 incisivos laterales
- 4 caninos, 2 en la parte superior y 2 en la parte inferior a ambos lados de los incisivos. También se les conoce como colmillos por su forma cónica
- 8 premolares de los cuales se encuentran 2 al lado de cada canino superior e inferior su forma es plana.
- 8 molares, que se distribuyen en 4 superiores y 4 inferiores, 2 a cada lado de la boca. Al igual que los premolares, su forma es plana
- Terceros molares, también conocidos como las “muelas del juicio” que se encontrarán al final de cada pareja de molares. Estas muelas no tienen edad fija para emerger y, de hecho, algunas veces no erupcionan todas o ninguna. Es de señalar que algunas veces deben ser extraídas, puesto que son frecuente causas de problemas bucales
La parte visible del diente se le llama corona y la parte que entra al hueso de la mandíbula es la raíz.
Las funciones según el tipo de dientes
De acuerdo a la posición y su forma, cada diente tiene una función específica, así se tiene que:
- Incisivos, su función es la de cortar el alimento
- Caninos, con ellos se arrancan y desgarran los alimentos
- Premolares, con ellos se inicia el proceso de masticación además con ellos se trituran los alimentos no tan duros
- Molares, trituran y muelen los alimentos dejándolos listos para tragar. De igual manera, con ellos se trituran los alimentos más duros
- Muelas del juicio o terceros molares, su función más de masticación es la de optimizar el espacio ocupado por los dientes en la boca, aunque a veces son causas de diferentes problemas por lo que deben ser extraídas.
Las partes del diente
El diente se compone de varias partes, seguidamente te las describimos:
- Esmalte, es la parte externa del diente y también la de mayor dureza
- Dentina, está debajo del esmalte y se compone de células vivas que elaboran un material mineral muy duro
- Pulpa, es la capa interna blanda y donde se encuentran los nervios y vasos sanguíneos
- Cemento, este es el tejido conectivo que fija las raíces del diente a las encías y, por tanto, al hueso de la mandíbula
- Ligamento periodontal, que son las fibras que unen las raíces del diente al hueso
¿Los dientes son huesos?
Esta es una pregunta muy común que surge por ciertas similitudes que tienen los dientes y los huesos en su composición, los 2 son muy duros, resistentes y contienen calcio, pero hasta ahí son parecidos.
Los dientes son más duros que los huesos, pero no tienen un tejido vivo como ellos que les permite crecer. La diferencia principal es que los dientes no tienen la capacidad de curarse como los huesos que al partirse se pueden soldar de nuevo.
Por eso es tan importante visitar al odontólogo cuando algún diente se fractura, fisura o se deteriora de cualquier manera.
Composición de los dientes
Como ya dijimos, los dientes están hechos de un material excepcionalmente duro y solo son superados por la dureza del diamante. Ahora veremos la composición de la parte más importante del diente desde la óptica de la dureza.
El esmalte dental
Al que igualmente se le denomina “tejido adamantino”, es la recubierta que protege todo el diente y se compone de una sustancia llamada hidroxiapatita, que le da la dureza extrema que lo caracteriza.
Este elemento consiste en sustancias mineralizadas de magnesio, calcio y fósforo, todo lo cual crea un compuesto que es el de mayor dureza en la naturaleza después del diamante. Este elemento también se encuentra en los huesos, aunque en concentraciones mucho menores.
Tiene la característica de ser gris azulado o blanco translúcido, dándole su color blanco la dentina que está debajo de él y que se compone de marfil, que es el segundo elemento más duro del cuerpo humano, después de la hidroxiapatita.
Es importante destacar que aunque la hidroxiapatita es muy dura, reacciona fácilmente con los ácidos que tienden a disolverla, los cuales desafortunadamente son segregados por las bacterias de la boca cuando metabolizan el azúcar.
Por ello es que resulta indispensable una buena higiene oral después de comer, si se quieren mantener sanos los dientes.
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