TIPOS DE DIENTES Y PARA QUE SIRVEN
Anatómicamente hablando, los dientes son elementos calcificados muy duros que se encuentran en la cavidad bucal, y son el primer elemento del aparato digestivo ya que gracias a ellos podemos morder, desgarrar y masticar nuestros alimentos.
Cronológicamente hablando, los primeros dientes de los niños son temporales o los llamados “dientes de leche”, cuya mayor importancia es apartar el espacio y preparar todo para la aparición de los dientes permanentes que se están formando debajo y pronto comenzarán a emerger.
Los niños tienen 10 dientes en la mandíbula superior y 10 en la inferior para un total de 20 dientes mientras que un adulto, posee 16 en cada mandíbula por lo que posee 32 dientes.
Los tipos de dientes y para qué sirve cada uno
A continuación te mencionamos los tipos de dientes permanentes del adulto, su cantidad y te damos una breve descripción de qué hacen.
- 8 Incisivos, ubicados en el frente de cada mandíbula en grupos de 4, su función es morder para cortar los alimentos en pedazos pequeños.
- 4 caninos, 2 en el maxilar superior y 2 en el inferior y van a cada lado del grupo de los incisivos. Se usan para desgarrar los alimentos.
- 8 premolares, 4 superiores y 4 inferiores que se encuentran a continuación de los caninos. Con ellos se desgarran y trituran los alimentos.
- 12 molares, son los más fuertes y de mayor tamaño, se localizan 6 en cada maxilar y sirven para masticar, moler y triturar. En este grupo se incluyen las muelas cordales o “del juicio” las cuales muchas veces no emergen por completo por falta de espacio en las mandíbulas.
Por lo general, estas últimas deben ser extraídas por provocar eventos muy molestos y dolorosos cuando tratan de surgir.
Partes del diente
En referencia a sus partes, cada diente se compone de 3 que son:
- Corona, es el área que se puede ver a simple vista sobre la encía y su forma viene determinada por la función del diente, es decir, cortar, desgarrar, triturar o moler.
La misma se subdivide en el “surco” que es su área media, los valles, y la “cúspide” qué es la región superior.
- Cuello o borde de la encía, es la parte que une la raíz con la corona del diente y se encuentra en el borde de la encía.
Esta es la parte más crítica desde el punto de vista médico, por cuanto es allí donde tienden a acumularse la placa bacteriana que ocasionan las caries, el sarro y las infecciones de las encías.
Por lo que es necesario que durante el proceso de higiene bucal te asegures de la correcta limpieza de esta zona de cada diente.
- Raíz, es la que mantiene fijo al diente y se encuentra por debajo de la encía e incrustada en el hueso del maxilar. Los dientes incisivos y caninos tienen 1 mientras que los premolares y los molares tienen varias.
Está unida a la corona mediante el cuello y a la encía con el ligamento periodontal junto con el cemento.
Estructura del diente
Ahora en lo que concerniente a la estructura como tal del diente, tenemos lo siguiente:
- Esmalte, es la parte externa visible de la corona la cual protege, es el elemento más duro del cuerpo humano y uno de los de mayor nivel de dureza en la naturaleza solo comparable con la del diamante.
Esta condición se la otorga un mineral llamado hidroxiapatita que lo compone en más de un 95%.
Tiene un espesor de entre 2 y 3 mm, a pesar de su dureza con el paso del tiempo sufre desgaste y puede ser afectado por las bacterias. Es translúcido y como no tiene terminaciones nerviosas, es insensible.
- Dentina, es la capa siguiente al esmalte y aunque es bastante dura, no lo es tanto como este último, ya que está compuesta solo en un 70 % de hidroxiapatita, 20 % (¿?) y el 10 % agua. La dentina contiene microscópicos túbulos hacia la raíz.
Es una capa protectora de la raíz y el diente en general, pero cuando el esmalte se daña, el frío y el calor llegan a sus túbulos los cuales provocan dolor y sensibilidad, también es la que da color a la pieza dentaria. Con los años, con el uso tiene tendencia a amarillearse, de ahí que existe la opción de blanquear los dientes.
- Pulpa, es la que contiene los vasos sanguíneos y nervios del diente, es decir, su parte “viva”, la cual tiene entre sus funciones formar continuamente la dentina, dan nutrición a la pieza dental, también es la advierte al organismo cuando el diente ha sufrido algún daño.
Es el elemento más sensible, si se ve muy dañada, por ejemplo por una pulpitis no tratada, puede necrosarse provocando la pérdida del diente.
- Cemento, consiste en una capa que se encuentra a lo largo de la raíz que lo fija al hueso a través del ligamento periodontal. Es parecido al esmalte aunque menos duro.
Los daños al cemento, que conllevan a su pérdida, es el principal factor de sensibilidad de los dientes por la exposición de la dentina.
- Ligamento periodontal, consiste en una capa de fibras colágenas que forma el tejido conectivo fibroso que une el cemento de la raíz del diente al hueso que lo aloja.
Sus principales funciones, además mantener fija la pieza, son dar resistencia al mismo a las fuerzas de la masticación y como receptor sensorial.
- Encías, aunque no son propiamente parte del diente si son parte de las estructura que fijan al diente, siendo una mucosa bucal que rodea al cuello y al hueso, dándoles protección.
Están entre las partes más afectadas por las enfermedades comunes dentales pero, que al mismo tiempo, son muy graves y molestas como la gingivitis y la periodontitis.
Los dientes son estructuras del cuerpo humano que no se regeneran, cumplen funciones muy importantes y que producen muchas molestias y diferentes grados de dolor cuando se enferman.
Por esta razón es muy importante cuidarlas siendo esto muy sencillo, ya que basta con tener una adecuada higiene oral cuyos detalles te los indica tu odontólogo.
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